Dibujante de sonrisas~

Comenzando~
Pelo oscuro para combinar con su realidad, flequillo largo para ocultar la tristeza y una falsa sonrisa para darte toda su felicidad.
Nunca fue un trabajo fácil, pero es lo que él quiso. Quería hacer feliz a cada persona que veía, quería ayudar a los demás; le daba igual no comer mientras los demás lo hiciesen, le daba igual sonreír mientras por dentro lloraba y se hundía si la gente no sacaba una sonrisa, por muy leve que fuese.
Primer encuentro~
Pelo castaño oscuro, falsa sonrisa y vida destrozada. ¿Persona a la que aprecia? Inexistente. ¿Persona que la quiere? Inexistente hasta el encuentro. Chica compleja, pero simple a la vista de los demás, sin intención de molestar ni esperanza de ser querida.
Surgió el encuentro con el dibujante, las cosas seguían igual para ella, aunque ya había alguien que se preocupaba por ella, alguien que la quería ver feliz y tener su mundo colorido.
No era poco lo que hablaban mientras ella se distraía de la realidad, dejando de lado sus problemas pero siguiendo estos ahí.
"Me importas" le dije de pronto, y tan pronto como lo dije en seguida dejó de creerlo, pero este ya vio el verde en su vida.
Fueron sus lágrimas cristalinas las que hicieron el azul, provocadas por quien decían quererla, pero solo fueron unas personas más temporalmente en su vida que lo único que buscaron era distraerse y echarse unas risas a causa de burlarse de ella, de borrarle una sonrisa.
Pronto vino el rojo, agua con cloro descolorida cuando aquel le partió el corazón, su confianza traicionó y solo supo dejar un mal sabor, un cristal roto en su corazón, una afilada espina de acero clavada en su interior.

¿Y ahora qué? ¿Cómo iba a dibujar una sonrisa en alguien que se sentía destrozada, triste, sola, amargada, sin motivos por los que ver lo bueno en nada? Podía alejarme, pero no la dejaría de lado, no apartaría la mirada, no tiraría la toalla en esta lucha, no dejaría ganar a la tristeza en esta batalla.
Egoísmo y acertadas fueron las palabras que pronuncié al decirte que siempre estaría contigo, que nunca te abandonaría, que por siempre sería tu amigo, que no tienes nada que temer conmigo, que da igual el lado de mi personalidad presente, da igual lo que me diga mi corazón o mi mente, da igual si algo malo me sorprende, no importa si un tridente helado atraviesa mi corazón ardiente, que falso como una serpiente; pero para ti, siempre habrá una sonrisa, alguien por quien preocuparse, alguien por quien merece la pena levantarse, alguien por quien no llorar cada noche en la almohada, alguien por quien sonreír cada mañana~